hoy, en el último día del año, recibí un e-mail con la historia de un pesebre familiar conformado por figuras de múltiples tradiciones. el mensaje venía acompañado de una hermosa foto, donde se podían apreciar, junto al pesebre clásico, figuras africanas y árabes, animales de nuestro campo, manualidades infantiles y un papá noel, y además el mantel, la lámpara y los cuadros que componían el rincón de la casa dedicado al nacimiento. cada objeto conformaba y embellecía una historia que imagino rica en experiencias compartidas por el clan ampliado: la familia y sus afectos.
los objetos no son nada sin la historia que los impregna. esa historia a veces responde a una tradición de milenios y otras a las vivencias de una o dos generaciones. de cada una, tomemos lo mejor para esparcirlo con un soplo suave pero sostenido, desde las palmas de nuestras manos hacia la vastedad del universo.
lunes, 31 de diciembre de 2012
domingo, 16 de diciembre de 2012
barajas
he andado juntando algunas barajas que la calle ha traído a mis pies. primero fue el as de oros -si, el culo sucio, que no deja de ser un as y no deja de ser de oros-, en un bar cerca de mi casa. luego el caballo de espadas, en la calle pablo de maría, a tres cuadras de las mismas coordenadas. hace unos pocos días fue el nueve de oros, un poco apretujado de más pero entero, frente a la fuente de los atletas, en el parque rodó.
no se qué hacer con este cuasi mazo de cartas españolas. me gusta juntar objetos al azar que se me aparecen en el camino -tengo una rosa blanca de tela colgada en el respaldo de la cama- pero en general no los identifico como parte de una colección. a las barajas sí. no solo forman un conjunto sino que llevan implícito un orden, una cosmovisión.
tengo tres, me estarían faltando 45, siempre y cuando mi mazo contuviera las 48. aunque es posible que esté formado por menos piezas (o más). en ese caso, cómo saber cuáles resta encontrar? qué fichas faltan en un puzzle que nunca se vio armado? la forma es tan solo un indicio y la representación a la que alude es una mera posibilidad: la imagen final podría no ser realista, ni siquiera figurativa!
de todos modos, confío en la buena suerte como en dios mismo -creo que son la misma entidad- y veo en las barajas un signo de buena estrella. en el reverso, todas son comodines.
no se qué hacer con este cuasi mazo de cartas españolas. me gusta juntar objetos al azar que se me aparecen en el camino -tengo una rosa blanca de tela colgada en el respaldo de la cama- pero en general no los identifico como parte de una colección. a las barajas sí. no solo forman un conjunto sino que llevan implícito un orden, una cosmovisión.
tengo tres, me estarían faltando 45, siempre y cuando mi mazo contuviera las 48. aunque es posible que esté formado por menos piezas (o más). en ese caso, cómo saber cuáles resta encontrar? qué fichas faltan en un puzzle que nunca se vio armado? la forma es tan solo un indicio y la representación a la que alude es una mera posibilidad: la imagen final podría no ser realista, ni siquiera figurativa!
de todos modos, confío en la buena suerte como en dios mismo -creo que son la misma entidad- y veo en las barajas un signo de buena estrella. en el reverso, todas son comodines.
martes, 11 de diciembre de 2012
deja vu
la chiru, con su post sobre la ropa vieja, me trajo algunos recuerdos.
me vi de nuevo caída dentro de una enorme remera de mangas largas, de un amarillo sol, cálido, refulgente. me acordé de lo feliz que fui por esos días.
también tuve añoranza de los momentos en que me sentí exhausta y sola, porque nunca antes había conocido mi propio valor con tanta intensidad.
amarillo sol, dije? sí, eso.
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